El ciberacoso se ha convertido en una preocupación creciente en el entorno educativo. Es crucial que las instituciones tomen medidas proactivas para garantizar la seguridad y bienestar de sus estudiantes. Ocasionando un impacto devastador en la vida de los estudiantes, afectando su bienestar emocional y rendimiento académico. Es imperativo que las instituciones educativas estén alerta y preparadas para abordar este desafío de manera efectiva. Esto implica enseñar buenas prácticas de comportamiento digital y concienciar sobre el impacto de las palabras y acciones en línea. Es esencial que las instituciones establezcan políticas claras y firmes en contra del ciberacoso. Estas políticas deben ser comunicadas de manera efectiva y seguidas de acciones concretas para prevenir y abordar cualquier incidente.
Para abordar el ciberacoso de manera efectiva, las instituciones deben trabajar en conjunto con la comunidad y organizaciones especializadas. Esta colaboración puede brindar recursos y conocimientos necesarios para crear un entorno digital más seguro y protegido.